Muchas de las personas que contactan conmigo pidiendo ayuda con su decoración es porque tienen el proyecto reformar su casa, o ya lo han puesto en marcha y se ven perdidos e inseguros.
Y este es uno de los momentos de la verdad, donde saber de decoración es estratégico: nos permite asegurarnos el resultado que estamos buscando
e invertir bien nuestro dinero.
El diseño de interiores y la decoración van de la mano.
Posponer la decisión de planificar la decoración de tu hogar hasta finalizar una reforma tendrá consecuencias negativas y no deseadas para ti.
Hoy quiero hablarte de este tema en profundidad. Sigue leyendo porque vale la pena.
Imagen: arno-smit-Knynaa97O0M-unsplash
Si has emprendido algún proceso de reforma sabrás lo importante que es supervisión diaria. Esta función la cumple la figura del jefe de obra, pero lo verdaderamente eficaz es que el propietario visite la obra casi a diario para resolver pequeñas dudas. Y hacer eso es complicado.
Si no vas a la obra para supervisar corres el riesgo de que:
Los obreros tomen decisiones sobre las “pequeñas incógnitas” que surgen a diario. Y que esas decisiones no te convengan o te salgan más caras.
De que luego cuando veas como han resuelto esas incógnitas sin tu opinión, el resultado no te guste o te resulte funcional cuando vivas en tu casa.
Tendemos a pensar que el arquitecto o la empresa que hará la reforma sabrá resolverlo TODO como nosotros queremos, con nuestras escuetas indicaciones.
Sin embargo, no nos damos cuenta que para poder llevar nuestro proyecto a buen puerto, es importante que nos impliquemos a fondo para dar las instrucciones adecuadas al equipo que va a trabajar en la creación de nuestro hogar.
Y para saber expresar lo que queremos no hay que ser arquitecto,
solo hay que saber con certeza qué resultado queremos conseguir, es decir, saber decorar.
Para lograr el resultado deseado con nuestro nuevo hogar, antes debemos:
Analizar en profundidad nuestras necesidades y deseos, y en función de eso,
Marcarnos unos objetivos de decoración correctos.
Tanto la arquitectura, exterior e interior de nuestra casa, como los materiales, acabados y colores, van a marcar y condicionar el resultado que obtengamos con nuestra decoración.
Si no controlamos eso, dime, ¿cómo podemos dar las indicaciones adecuadas a los profesionales que contratemos?
Te lo diré yo: difícilmente.
Existen 7 poderosas razones por las que es importante invertir en aprender decoración.
Y todas ellas tienen un denominador común: te dan la tranquilidad de saber que invertirás bien tu dinero.
Tanto el que inviertas en la reforma, como el que inviertas en la compra de muebles y accesorios que pondrás en tu hogar ideal.
Y esas 7 razones son las siguientes:
1. Sabrás marcar unos objetivos correctos y detallar lo que necesitas.
Estudiar tus necesidades y deseos antes de terminar tu casa te permite anticipar aspectos relevantes asociados a las funciones que deberá cumplir cada estancia.
2. Resolverás bien la iluminación, asegurándote las tomas de luz puntual que necesitas.
Por ejemplo, tener los enchufes donde tú los quieres para asegurarte de que cada estancia quede bien iluminada y sea acogedora. Los arquitectos suelen acentuar la iluminación general pero si tu no les das unos objetivos correctos no pueden acertar con las tomas de luz puntual y ambiental que puedas necesitar. Pondrán las que ellos consideren estándar.
3. Te asegurarás las soluciones de almacenaje que verdaderamente necesitas para tener un hogar versátil. Ni más ni menos.
Te pongo un ejemplo: En dormitorios pequeños, muchas veces se opta por poner armarios empotrados, eliminando la posibilidad de instalar en ellos una habitación de invitados con cama de matrimonio. Si fuera el caso, este tipo de espacios solo requieren de una buena cómoda y unas mesitas de noche, ya que las visitas no van a llenar un armario con sus cosas, pero querrás que duerman cómodos y tener espacio para más personas. ¿Cierto?
4. Te ayuda a ahorrar dinero en la reforma y también después de esta.
Ahorrarás en temas como el consumo de energía. Solo te diré que hoy en día se tiende a abusar de la instalación de luces en el techo (porque eso encarece la obra), lo cual luego te lleva a consumir demasiada luz y a pagar por tu reforma más de lo que necesitas. Esto perjudica a tu bolsillo y al planeta. Saber el uso que darás a cada estancia y cómo la distribuirás, te ayuda a saber cuál es el lugar más adecuado para los radiadores, según tu criterio y no el del arquitecto. Planificar te permite ahorrar energía.
Imagen: Unsplash
5. Lograrás que la arquitectura interior de tu nueva casa favorezca y potencie el estilo que buscas para tu hogar.
Tener claros los estilos decorativos que van con tu personalidad, te permite anticiparte y escoger cosas como: el tipo de ventanas más adecuadas o los acabados y el color ideales, para que tu cocina esté cohesionada con el estilo de la casa o el tipo de pintura y el acabado que buscas para tu paredes, entre otras cosas.
No se trata de hacerte una cocina moderna y ya está.
Si no trabajas estos aspectos antes de terminar tu reforma puedes encontrarte que el tipo de acabados que has escogido no encaja con el resultado que quieres para tu decoración. Pasa muy a menudo.
6. Te asegurarás una distribución correcta, antes de hacer tu reforma.
Planificar la distribución de muebles en cada estancia, te permite asegurarte de tener la mejor distribución para tus necesidades y las de los que viven contigo. Decidir si quieres una librería de obra o si prefieres prescindir de determinadas divisiones en favor de un espacio más diáfano y luminoso.
7. Te permite asegurarte, antes de la reforma que podrás aprovechar los muebles que ya tienes y encajarán en tu casa nueva.
Sabrás hacer un plano y distribuir tus muebles actuales. Si no lo haces corres el riesgo de encontrarte un radiador, que ya no puedes mover, en el lugar donde quería poner tu aparador o la alacena que heredaste de tu madre.
Y al hilo de todo esto… ¿de verdad crees que un arquitecto y un constructor van a ayudarte a crear tu hogar ideal si tú no participas y te implicas a fondo?
Puedes pensar y con razón que ellos harán su trabajo mejor que tú. Pero recuerda: ellos no son decoradores, son arquitectos y constructores.
No olvides que, si amas la decoración, y si le das importancia a tener el hogar de tus sueños, tú también tienes un trabajo que hacer, que va en tu propio beneficio:
Analizar en profundidad tus necesidades y deseos.
Marcar unos objetivos para tu decoración
Y hacer un proyecto para cada estancia que encaje con tus deseos y estilo de vida.
Y todo eso lo puedes lograr en poco tiempo con EL MÉTODO de La Academia de Decoración.
Durante la formación, que dura 4 semanas, harás tu primero proyecto con mi acompañamiento. Y si lo deseas, una vez finalizado el curso, podrás seguir contando con mi acompañamiento.
Porque practicar es importante y tener un acompañamiento experto en tus primeros proyecto de decoración te dará la seguridad que necesitas en tus decisiones.
Y todo esto, por mucho menos de lo que cuesta un decorador profesional.
Si quieres asegurarte el resultado en la reforma o la construcción de tu nuevo hogar, entra ahora infórmate sobre EL MÉTODO y descubre los planes que te ofrezco.
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Muchas gracias por leer y compartir.
Nos vemos pronto. ¡Que tengas un feliz día!
María González Revuelta
LA ACADEMIA DE DECORACIÓN